Ubicación:La Pacanda

🌿 El Secreto en el Agua y Cuna de Leyendas 🛶

Perteneciente al municipio de Tzintzuntzan, esta isla es un refugio de paz habitado por apenas 400 personas. Pero su nombre guarda un significado activo y profundo: en purépecha, La Pacanda no es un sitio estático, sino que significa “Empujar algo al agua”. Un nombre que evoca el movimiento constante de la vida lacustre y el inicio del viaje.

👑 Donde Nació la Belleza Purépecha En esta tierra se respiran historias antiguas. Entre varias leyendas, destaca la de la Princesa Mintzita, la última princesa purépecha. Se cuenta que ella buscó refugio en La Pacanda con el corazón herido, sintiéndose desplazada del amor de su esposo, Huitzimengari, por una mujer europea. Aquí, Mintzita rogó al Sol y a la Luna que resaltaran su belleza para recuperar a su amado. La respuesta de los astros fue divina: así surgió el traje regional de la mujer purépecha, un regalo de luz y color que perdura hasta hoy.

🦆 El Misterio de la Laguna Interior La Pacanda guarda un secreto geológico en su centro: una hermosa laguna interior donde la vida florece entre patos, garzas y carpas. Lo fascinante es que se cree que este espejo de agua es, en realidad, la boca de un antiguo volcán, dada su altura respecto al resto del Lago de Pátzcuaro. Es un sitio de enorme tranquilidad que invita al descanso y a la contemplación.

🚲 Pueblo de Tradición y Calma Al ser una isla de terreno amable, es el destino perfecto para disfrutar sin prisa:

– Recorridos: Puedes explorarla a pie o en bicicleta, dejándote envolver por su arquitectura tradicional.

– Vida y Muerte: Otro de sus grandes atractivos es visitar su iglesia y el cementerio, que se encuentran a muy corta distancia el uno del otro, un recordatorio de la cercanía con los ancestros.

🚤 Travesía hacia la Isla Llegar aquí es parte de la aventura y tienes dos opciones:

– Desde Muelle San Pedrito: Un paseo escénico de aproximadamente 45 minutos, donde disfrutarás de la vista de las islas de Janitzio, Tecuén y Yunuén antes de llegar.

– Desde Ucasanástakua: La ruta rápida y directa, con un recorrido de solo 15 minutos al muelle de La Pacanda.

📍 ¿Por qué ir? Para descubrir el contraste entre la calma de la isla y el movimiento de su nombre (“Empujar algo al agua”). Para estar en el lugar exacto donde el mito dice que nació la vestimenta purépecha y para sentir la paz de una laguna que vive dentro de una isla. Es el sitio ideal si buscas silencio, historia y naturaleza en un mismo lugar.