El espejo de dos mundos: Teatro Emperador Caltzontzin

Donde el último rey purépecha y la cultura española se encuentran.

Si vas al teatro, llega 15 minutos antes. El espectáculo principal no empieza en el escenario, sino en las paredes. Este recinto, impulsado por el General Lázaro Cárdenas, guarda dos visiones artísticas distintas bajo el mismo techo.

La Experiencia en la Sala (Roberto Cueva del Río): Al entrar al auditorio, te envuelve la historia oficial. A diferencia de otros murales bélicos, Cueva del Río pintó un canto a la diplomacia: el momento exacto en que el Rey Caltzontzin se encuentra con los españoles. No es una escena de sumisión, sino de reconocimiento entre dos noblezas.

El Detalle Imperdible: Mira hacia arriba. El plafón del teatro es una gigantesca “Batea de Pátzcuaro” perfilada en oro. Estás literalmente sentado dentro de una artesanía michoacana.

El Secreto en la Planta Alta (Ricardo Bárcenas): La mayoría se queda abajo, pero tú sube al vestíbulo y la galería superior. Ahí descubrirás los murales de Ricardo Bárcenas, el artista que se encargó de narrar las “Industrias de Michoacán”. Mientras abajo reina la historia, arriba vive la gente: escenas de mercado, pescadores y cocina tradicional que celebran la economía y la vida diaria del lago.